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Comprar una casa: cosas que hay que saber antes de comprarla
Comprar una casa es sin duda un paso difícil, hay que hacer esfuerzos financieros y de tiempo, hay que planificar la inversión y el miedo (o la posibilidad) de cometer un error está siempre a la vuelta de la esquina.
Según especialistas en financiación de hipotecas al 100% la compra de una propiedad requiere el máximo cuidado. De hecho, el examen de una casa, que podría convertirse en la suya de por vida, impone una serie de reflexiones importantes.
- ¿Estoy comprando la casa adecuada? ¿Y si no es para mí?
- ¿Y si no me gusta? ¿Tendrá los espacios adecuados, bien organizados?
- ¿Es tan luminoso y espacioso como me gusta?
- ¿Estoy obligado a amueblar o puedo cambiar? ¿Es cómoda la cocina?
- ¿Y el cuarto de baño, puede tener un baño de servicio adicional?
- ¿Cuál es la mejor orientación?
Estas son las principales preguntas que se plantean las personas que van a comprar una casa y buscan consejo sobre lo que deben comprobar antes de comprar.
Comprar una casa: consejos del arquitecto
En este post encontrarás una lista de los principales errores que puedes cometer al comprar una casa.
Los errores que puedes cometer son principalmente económicos y/o relacionados con el estado del inmueble. Una evaluación cuidadosa puede ayudarle a evitar ambas cosas.
Además del precio de la vivienda, hay que tener en cuenta los gastos accesorios, que suponen alrededor del 10% del total e incluyen los impuestos, los honorarios de la agencia (si los hay) y los gastos del notario.
Comprar una casa paso a paso
Primer paso: elegir el inmueble adecuado
El precio no es el único elemento a tener en cuenta.
Hay muchos factores determinantes en la elección, los más importantes son la luz, el estado general del piso y del inmueble en su conjunto, la ubicación y el ruido.
Frente al valor de la vivienda, dado por sus características y los precios de la zona, algunos elementos pueden rebajar el precio: la ausencia de balcones, la ausencia de ascensor, la ubicación en semisótano o planta baja, la ausencia de varios baños.
Siempre es conveniente hacerse una idea previa de la zona en la que se encuentra la vivienda, compararla con otras similares en las agencias inmobiliarias y hacer una primera selección entre todas las ofertas, para no perder la vida visitando casas.
Antes de cualquier negociación con el propietario, siempre es necesario ver la casa en persona, porque se pueden ver muchos más detalles de los que se esconden tras las fotos.
Las variables a considerar en persona son
- El estado general del inmueble y su antigüedad
- Si se ha llevado a cabo alguna obra, renovación y/o mantenimiento
- Las instalaciones (la antigüedad de las mismas y su adecuación a las normas)
- Si es habitable y tiene conexiones de electricidad/gas/agua
- Si la casa es caliente/fría, oscura/luz, ruidosa
- Si la ubicación es buena y hay aparcamiento
- Si hay transporte público y/o tiendas cercanas (farmacias, mercados, puestos de fruta)
- Si hay que mantener un jardín o una zona verde
Haz bien las cuentas antes de comprar una casa
Comprar una casa es la inversión más cara, pero a veces la gente lo hace a ciegas: en algunos casos sería mejor vivir en una casa alquilada para no privarte de tu capital, que podría invertirse feliz y provechosamente en otra parte, y sin embargo la gente sigue comprando propiedades caras sin planearlo.
No olvides los gastos imprevistos
Al comprar una casa, los impuestos que hay que pagar varían en función de si el vendedor del inmueble es una empresa constructora o un particular. Los impuestos que hay que pagar, según el caso, son el IVA, el impuesto de registro, el impuesto sobre las hipotecas y el impuesto catastral, el impuesto sobre actos jurídicos documentados y el impuesto hipotecario.
Elige entre una casa unifamiliar o un piso
No olvides que ser propietario de una casa en un edificio significa pagar las cuotas de la comunidad todos los meses y otros extras que pueden aumentar significativamente tu desembolso.
Las casas necesitan mantenimiento, por no hablar de los gastos comunes (fachada, antena, ascensor, etc.) y del coste del paisajismo si hay jardín.
En el caso de una vivienda unifamiliar, los gastos no son fijos mensualmente, sino que pueden ser incluso mayores porque no se dividen entre los propietarios. Por un lado, esto parece conveniente, pero, por otro lado, en caso de avería o daño, todos los costes corren a cargo del propietario.
Aprenda a lidiar con los vencimientos largos
No vale la pena comprar por más de 25 años, ya que la casa se vuelve demasiado cara cuando se suman todos los intereses.
Se recomienda que el importe de la hipoteca, sumado al resto de las deudas (pagos del coche, préstamos personales), no supere el 35-40% de los ingresos del titular de la hipoteca.
Hoy en día, el mundo del trabajo se ha vuelto más volátil. Los trabajos fijos y los contratos indefinidos no suelen ofrecer ninguna garantía de que el trabajo vaya a durar. Haz bien tus cuentas y déjate un margen que te permita vivir cómodamente en caso de un evento X.
Intenta negociar el precio
Prepárate para regatear la compra y hacer una contraoferta, pero siempre después de estar seguro de tus cuentas.
Si tu presupuesto es de 200.000 euros, por ejemplo, no te muevas de ahí. Si eso no es suficiente, no es la casa para ti.
No sirve de nada endeudarse y pedir prestado más de lo que se puede pagar.
No te precipites
Los precios de los inmuebles en determinadas zonas no son siempre los mismos. Pueden subir o bajar según el periodo.
Por lo tanto, considera la compra cuidadosamente. Si no tienes necesidades urgentes de vivienda, espera la mejor oportunidad o trasládate a zonas más baratas.
Es aconsejable visitar al menos 3-4 propiedades antes de comprar, para entender si el precio se corresponde con el valor de mercado o si está desequilibrado en exceso.
Sin embargo, no olvides que puedes sentir la sensación de una casa desde el principio. Si es la casa de tus sueños, la intuición te lo dirá enseguida. No renuncies a la parte emocional de la compra.